II Simposio REFLEXIÓN SOBRE EL FUTURO AUDIOVISUAL
15 de junio de 1994Miedo a la tecnología
23 de septiembre de 1994Este articulo maneja las sensaciones que aporto a Venezuela la ejecución del II simposio internacional reflexión sobre el fututo audiovisual, toda una oportunidad para los que están inmersos en el campo de la tecnología y la Tv. Los asistentes y organizadores mancomunaron experiencias y tejieron empatía con la idea.
“El simposio provoco un aprendizaje verdadero, que afianzado en la mente en los sentidos, en vibrantes experiencias individuales, permanecerán imborrable.”
La embargante emoción compartida entre la escena y el público, que en ocasiones siente el espectador en una sala ante la presentación de una ópera, una obra de teatro, un musical, una película, siempre y sólo ante el arte puro, en esta oportunidad fue profundamente palpada frente a una situación diversa que se tornó en un espectáculo intelectual y artístico durante tres días de sesiones de reflexión. Allí la razón, el arte y la tecnologia se dieron la mano en la presentación de las ideas, los equipos y programas que constituyen nuevas tecnologías de la imagen, el texto y el sonido. Ocurrió al finalizar la tarde del viernes 17 de junio en el acto de clausura del II Simposio Internacional Reflexión sobre el Futuro Audiovisual, Sueño y Realidad, con el logro de su objetivo de conocer, analizar y difundir entre universitarios, docentes, investigadores y realizadores audiovisuales y de multimedia, los variados logros, avances y perspectivas de las nuevas tecnologías de la comunicación, especialmente en las áreas hoy entrelazadas de lo audiovisual y la informática.
En la sala se sentía un fluir de energía positiva que tocaba a uno y a todos los presentes. Embargados por lo visto, oido y sentido a través de conferencias, charlas, muestras de obras maestras contemporáneas visionadas en pantalla gigante cual espejo de monitores y computadoras, videoconferencias internacionales y exhibiciones de hardware y software sofisticados: público, conferencistas, coordinadores, organizadores, personal de apoyo, técnicos, jóvenes creadores, artistas, expositores, demostradores de equipos, alumnos y profesores de la Escuela de Cine y Televisión, todos plenos por la emoción sintiéronse uno y el mismo, rubricado en el brote de llanto de una participante, al luego dar individualmente las gracias por lo recibido.
Y con esto, ¿está todo dicho? No... va más lejos. El simposio provocó un aprendizaje verdadero, que afianzado en la mente y los sentidos, en vibrantes experiencias individuales, permanecerá imborrable. Emociones ayer sentidas comienzan a expresarse más tarde en palabras y, a partir de entonces, parece que perdieran aquella su fuerza primigenia. Pero, el recuerdo imperecedero es sello en la memoria y punto de referencia al cual volver cuando otras experiencias, de génesis intelectual y artísticas, como en este caso, vuelvan a rozar las fibras, sensitivas, el ámbito de la emoción, a partir de motivaciones provenientes, peculiarmente, de la esfera reflexiva.
La razón y la emoción se hermanaron en el evento y provocaron largos y sentidos aplausos. Todo lo expuesto en ese II Simposio -de positiva visión futurista para la comunicación, la educación, lo audiovisual, la computación y las telecomunicaciones- consecuencias positivas e importantes ha de traer. Enhorabuena a los que disfrutan su empatia con una idea y en trabajo fecundo, la ven cristalizar.
Fuente: Periódico el Nacional Pág. A-4
28 de Julio de 1994